Mientras que para algunos niños no hay el menor problema en mudarse a su propio cuarto, hay otros a los que les desagrada esta idea, sobre todo cuando se busca que duerma en su cama, que es cuando suelen buscar a toda costa quedarse en la habitación de sus padres.

Puede que conseguir que un niño se acostumbre a dormir en su habitación sea un proceso tardado, pero tranquila, después de todo, se trata de formar este hábito en él. Así que aquí te dejamos algunos tips que puedes aplicar para que este proceso sea un poco menos difícil:

Dale ánimo y ayúdalo a ver las cosas de otra manera

Dile que entiendes que se sienta diferente ante este cambio pero que, después de todo, no están tan lejos. Tú sigues estando en una habitación cercana y si necesita algo acudirás a ayudarlo. ¡Hazle saber que siempre está protegido!

Traten de ser lo más firmes posible

Si el niño ya dormirá en su cuarto, hagan lo posible para que así sea siempre. Aunque se haga tarde y tu hijo se haya quedado dormido en tu cuarto, lo mejor es que lo lleven a acostar al suyo, pueden permanecer con él un par de minutos por si se despierta.

Acuéstalo y lee para él

Así tu pequeño se sentirá en un entorno de confianza y estar a tu lado lo hará sentir más seguro. Además, leerle cuentos infantiles, trae beneficios al desarrollo cognitivo de los niños y a su estado de ánimo.

Si tiene miedo, pregúntale a qué y ayúdale a superarlos

Dale algunos consejos y haz que se sienta comprendido. Platícale de los miedos que tú tenías de niña y de cómo le hiciste para superarlos. Busca algún cuento con un personaje que esté pasando por una situación similar a la de él y que logra sacarla adelante. A mí de niña me gustaba escuchar el de “La rana tiene miedo”.

Que su cuarto le guste

Decora su cuarto de manera que le parezca agradable a tu hijo, le ayudará mucho. Si está contento con su habitación puede sentirse más cómodo ahí. Incluso puedes conseguirle un muñeco lindo para que sea su compañero de cama, no tienes que gastar mucho dinero en esto.